miércoles, enero 15, 2014

GAMONAL O LA PARADOJA DE LA ADMINISTRACIÓN LOCAL


- A nivel europeo, la Comisión bendice la inyección de dinero público a los bancos, y no pasa nada… Es la única solución para mantener la estabilidad financiera y para que no se resienta aún más el empleo… Nos dicen… ¡Amén Jesús! ¡Ajo y agua!

- A nivel del Estado, cierto candidato mintió descaradamente sobre la autoría de un atentado terrorista, con el único propósito de obtener réditos electorales, y no sólo no dimitió, ni fue destituido, sino que, en la siguiente legislatura, salió elegido Presidente del Gobierno.

- En cierta Comunidad Autónoma, se insiste en la celebración de un referéndum anticonstitucional, se arma cierto revuelo mediático, se cruzan declaraciones enfrentadas entre los políticos, pero ni se pronuncia el Tribunal Constitucional con urgencia, ni en la calle se nota un ambiente de crispación excesivo (afortunadamente), sino que parece que todo el mundo está sentado esperando tranquilamente… Bueno ¡A ver qué pasa!

- Sin embargo, el Alcalde de la fría y tranquila ciudad de Burgos, con cara de no haber roto un plato en su vida pero con demasiados contactos en el sector de la construcción, propone hacer un bulevar con aparcamientos subterráneos, en contra de la opinión de la mayoría de los vecinos del barrio de Gamonal y se arma un follón increíble, la gente se moviliza masivamente y se organiza en turnos para impedir el movimiento de las máquinas durante cuatro días, se queman contenedores, hay cargas policiales y detenidos. Al final, en pro de la convivencia, el Alcalde ha tenido que dar marcha atrás, pero solamente tras haber tensado la cuerda hasta unos extremos totalmente inadmisibles en un país moderno y democrático.

Conclusiones:

1) Hasta que no se producen disturbios, muertos y noticias que salgan en los telediarios, parece que los problemas no existen. ¿Por qué esperamos tanto para resolver los conflictos? ¿Por qué tensamos tanto la cuerda cuando sabemos que se puede romper y saltarnos a la cara en cualquier momento?

2) A la mayoría de la gente realmente le importa tres pepinos todo aquello que se salga del ámbito personal, doméstico o local más cercano. La macroeconomía, las políticas de Estado o de ámbito europeo y supranacional nos superan, nos suenan a chino y nos la traen al pairo ¡El día a día ya es bastante complicado y extenuante como para encima preocuparme por lo que se cuece en Bruselas!

3) La mayoría de la gente ha desarrollado un cierto “callo” o excesiva capacidad de aguante y sólo salta cuando se le tocan reiteradamente los cojones en su propia casa... ¡Menos mal! Ya empezaba a pensar que todos nos hemos convertido en una especie de autómatas insensibles.

Damos por hecho que la economía y la política funcionan de una determinada forma, porque son así, incluso hay gente que en las reuniones familiares se autoprohíben hablar de dinero y de política, para evitar voces, tensiones y crispaciones. Pero tanto el sistema económico (verdadero poder del que emanan todos los demás), como la organización política de los partidos y las instituciones no son cosas inamovibles, pueden cambiarse si se une el suficiente número de gente y presiona de manera organizada en la dirección correcta, esto no es nada fácil, ya lo sé, pero se puede hacer o, al menos, se puede y se debe intentar ¡A veces los milagros suceden! Porque existen los “currantes del milagro”:

Resuena en el sombrero: “Rock´n´Roll Revolution in the Streets part 2”.- Miracle Workers (Portland (Oregon), 1988).

No hay comentarios: